Los Zafiros. A cuerpo entero.
En los cimientos de toda gran empresa, de todo gran proyecto, está el amor; es por eso que cada uno de nosotros pone el alma en lo que hace y se siente un Zafiro. Así nos habla Jorge E. Echeverría, director actual del cuarteto de voces Los Zafiros, agrupación que, desde fundada en 1962, marcara hitos en la música popular de Cuba. En la década de los 70, ese antológico cuarteto se desintegró debido a causas de distinta naturaleza, entre ellas, la temprana muerte de algunos de sus integrantes
En 1997, y como homenaje a ese excepcional grupo, fue presentado, en el contexto del XIX Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, el film "Zafiros, locura azul", que alcanzó el premio de la popularidad. Volvían al presente con esas interpretaciones peculiares por su perfecto acoplamiento, rara armonía y particular estilo como Bellecita, Ofelia, La caminadora, Un nombre de mujer, Hermosa Habana, Bossa cubano, Herido de sombra, He venido, Rumba como quiera... y tantas otras que hoy atraen al gran público sin fronteras de edades.
La magia de "Los Zafiros" Después de 10 años de silencio Eduardo Hernández (El Chino), uno de los fundadores e integrantes, se dio a la tarea de rescatar la agrupación, ayudados por Mariano Suárez del Villar, que en aquel tiempo era musicalizador del I. C. R.T. y por Manuel Galván, guitarrista y arreglista. En primer lugar -destaca Jorge- buscaron las voces que más se les parecieran, los timbres similares; todo, con el propósito de seguir el camino ya trazado por sus antecesores.
El móvil esencial de esta noble empresa era el de rescatar aquellos temas que habían quedado en los corazones del pueblo; por otra parte, había una segunda intención: incorporar nuevas melodías, ampliar el repertorio con el mismo estilo y la misma línea melódica.
Así surge un nuevo cuarteto de voces, en el año 1987. ¿En qué consiste esta especie de hechizo que ejercen Los Zafiros sobre todos los que tienen el privilegio de escucharlos?. Es la atmósfera creada por el acoplamiento perfecto de cuatro voces que integran sus peculiares timbres y efectos vocales; es también esa especie de sentido de pertenencia a una agrupación cuyas raíces hay que buscar en lo más auténtico de la tradición musical cubana.
Los mismos y otros Zafiros Hay quienes se cuestionan la autenticidad del grupo, afirmando que se trata de una imitación, una copia de aquellos Zafiros de la década de los 60. A ello el director responde: " ha constituido un honor para nosotros el volver los ojos a esa agrupación que dejara profundas huellas en el pueblo: que nuestras voces se parezcan, que nuestros timbres sean semejantes, nos enorgullece".
Hoy "Los Zafiros" está considerada como una agrupación emblemática; sus integrantes se propusieron rescatar una valiosa tradición de la música cubana y lo han logrado. Gracias a su tesón y reconocidos valores, esos temas que en una etapa histórica hicieron vibrar los corazones y alimentaron el espíritu de miles de oyentes, reviven en las voces de Ramón Espinosa (falsete), Miguel Angel Savuren (3ra. voz), Mario Pérez Solís (2da. voz) y Jorge E. Echeverría (4ta. voz y director), con el acompañamiento del guitarrista Israel Hernández López.
Los escenarios de Cuba y el mundo reciben a Los Zafiros de hoy, con el mismo espíritu que recibieron a Los Zafiros de ayer. Este año 2001 celebran sus 13 años de vida artística. Todo lo han hecho -subraya su director- con el mayor respeto hacia aquellos Zafiros que les antecedieron; esto es, "A cuerpo entero", lo que equivale a decir. "A corazón abierto".
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