Luego de más de 20 años de investigaciones Eleuterio Páez vive convencido de las propiedades beneficiosas que el Vimang aporta a la salud humana.
La corteza de la planta de mango es la principal materia prima empleada en este suplemento nutricional.
Un colectivo de trabajadores se esfuerza por cumplir las metas productivas. Las bajas capacidades de producción de esta industria no logra satisfacer la alta demanda que tienen hoy la línea de productos Vimang.
"En el laboratorio, además de la búsqueda de nuevas formulaciones para este compuesto natural, se vigila la calidad final de las producciones."

El uso de la corteza de la planta de mango como remedio efectivo para la cura de muy variadas dolencias viene de una arraigada tradición familiar. Cuando niño, Eleuterio Páez no conoció en su hogar otra medicina que no fuera la que el campo brindaba pero sobre todo aquella que su padre preparaba hirviendo pedazos de corteza.

Muchos años de experimentación han hecho posible hoy desarrollar un compuesto natural al que le son reconocidas propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, analgésicas e inmunoreguladoras; y que provee al organismo de minerales favorables para la salud humana. Como parte de este proyecto investigativo, una clínica radicada en Calle 100 y Ojo de Agua, en el municipio habanero de Arroyo Naranjo, recibe a todas aquellas personas interesadas por el Vimang, nombre comercial de la línea de productos integrada por extracto acuoso, jarabe y crema cosmética. El responsable del consultorio, el doctor Reymundo Miranda Leyva afirma que «la profilaxis es lo más importante en el empleo de este compuesto natural». Según sus consideraciones, «para lograr presentarlo como un medicamento se tendría que hacer un estudio más profundo, trabajar en la dosificación y realizar muchos más ensayos clínicos, con los que pueda demostrarse a los escépticos que el Vimang es muy bueno». «Para nosotros son innegables en estos momentos sus propiedades antiangeogénicas, que nos han abierto un camino hacia el posible tratamiento de enfermedades oncológicas.» El suplemento nutricional resulta beneficioso, además, para desacelerar los procesos de envejecimiento de la piel, propiedad esta que se la otorgan los flavonoides polifenólicos, los oligoelementos –ácidos grasos polinsaturados presentes en su composición. El Grupo Empresarial LABIOFAM asumió esta área de investigación que dirige el ingeniero Osvaldo Manuel Rodríguez y en un laboratorio y planta de producción asociada a la propia clínica de Ojo de Agua, se buscan nuevas formulaciones del producto. «Tiene muchas propiedades todavía por explorar, explica Osvaldo; y nuestros especialistas buscan nuevas maneras de presentación, pero sobre todo lograr elevadas concentraciones del compuesto.» La alta demanda de cada uno de estos productos de origen natural ha dirigido la mirada hacia la necesidad de ampliar las capacidades de la industria. Osvaldo anunció la puesta en práctica de nuevas vías para obtener mayores cantidades del extracto concentrado, base para la fabricación de la crema cosmética, el extracto acuoso y el jarabe. «Estamos utilizando, a manera de prueba, una planta de glucosa en la provincia de Cienfuegos, que tiene un sistema de maceración, extracción y concentración por efecto muy similar al nuestro. Con esto asumimos un proceso a gran escala que nos permitirá lograr miles de litros de este concentrado primario, lo cual redundará favorablemente en un incremento notorio de nuestras producciones finales.» Más de 200 tipos de anacardiáceas, originarias del continente asiático, se encuentran distribuidas en todo el mundo. De esta extensa familia, perteneciente a la Mangifera índica, sólo unas diez especies son efectivas para su empleo en este tipo de terapia. Es interés de los directivos, especialistas, técnicos y obreros que desarrollan los productos Vimang, que este compuesto sea empleado de manera profiláctica y no sólo como una opción extrema para la solución, o como paliativo, a determinados problemas de salud. Es evidente una mejoría en la calidad de vida de la persona enferma, mas su consumo habitual, a decir de Paéz, «puede evitar padecer de un sinnúmero de enfermedades».

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