Dyango anunció en Cuba su intención de grabar con grandes de la música cubana.

Fue la estrella extranjera invitada al Festival Mundial de la Canción Popular, Varadero 2008, donde su voz áspera y conmovedora, con dejillo a suave sonido de trompeta, llenó de magia romántica la noche inaugural del festival, que volverá a realizarse cada verano en esta famosa playa, situada a unos 130 kilómetros al este de la capital cubana. Dyango cautivó a miles de cubanos en el mayor teatro habanero, y retornó a la radio cubana como en sus tiempos de gloria, descubierta ahora por juventudes atiborradas de reguetones, rock duro y salsa.

Su estancia de cinco días en la mayor isla caribeña rindió homenaje a figuras de este terruño que le sirvieron de savia vital en su carrera artística: Concha Valdés Miranda, Isolina Carrillo, Antonio Machín, René Touzet. Además, reconoció en público la maestría más contemporánea de Pablo Milanés, Van Van, la diva Beatriz Márquez e Irakere.Fue oxígeno para la nueva etapa en la vida de este artista que aún disfrutando de excepcionales facultades vocales, pretende retirarse del mundo discográfico a fines de este año, tras grabar su disco número cincuenta.

«Será de boleros, obviamente lo grabaré en La Habana y tendrá como director musical a ese monstruo del jazz que responde al nombre de Chucho Valdés, con quien es un privilegio poder trabajar», declaró a Excelencias. Celia Cruz, Oscar D’León, Sheena Easton, Roberto Goyeneche, Pimpinela, el tenor Jaume Aragall, son artistas que con anterioridad se le unieron en fonogramas.

Dyango ha obtenido a lo largo de su carrera 55 discos de oro y 40 de platino, que le han sido concedidos tanto en España como en diversos países latinoamericanos e incluso en Estados Unidos. En la actualidad experimenta en la pintura, a manera de nuevas formas de expresión artística, quehacer que confiesa le proporciona una gran satisfacción personal cercana al nivel de su música. Confesó, al término de su conversación, que es Piscis, del 5 de marzo del año 1940, algo que desconocen millones de sus seguidores, así lo expresó amablemente a Excelencias

Su voz áspera y conmovedora, inundó nuevamente el dial de las radioemisoras cubanas, descubriéndose ante juventudes saturadas de reguetones, rock duro y salsa