Cálido refugio de los amantes del mar
Marina Hemingway, al oeste, y Marina Tarará, al este de la capital cubana, ofrecen una acogida excepcional a quienes desde otros lares escogen al litoral habanero como destino de sus aventuras marineras.
Las dos ofrecen una temporada internacional de pesca deportiva de cuatro concursos, que inicia el Torneo Internacional de pesca de la aguja Ernest Hemingway, siempre enmarcado entre los meses de mayo y junio.
En ese período, la corriente del golfo pone a disposición de los artífices del sedal ejemplares adultos de elevada calidad, como subrayó en más de una ocasión en su obra el escritor estadounidense.
En 2005, se desarrollará el certamen número 55 del más emblemático y reconocido de los concursos internacionales cubanos de pesca, cuyo ganador obtiene el derecho a intervenir en el torneo mundial de campeones Rolex-IGFA (Federación Internacional de la Pesca Deportiva), con sede en cabo San Lucas, Baja California, Estados Unidos.
Al decir del Comodoro José Luis Escrich, quien dirige el Club Náutico Internacional Hemingway, de La Habana, se trata de una ocasión especial por el simbolismo de un aniversario cerrado de uno de los torneos de su tipo más antiguos del mundo.
El autor de El viejo y el mar, laureado con el Premio Nóbel de Literatura, cedió su nombre para designar a la cita de los sedales, las varas y las corrientes. Aunque en principio fue reacio, su pasión por las cacerías marinas y el deseo de inmortalizar la lucha del hombre contra los imponderables del reino de Neptuno, amén de los argumentos de los organizadores, lo convencieron para que en 1950 naciera el certamen Hemingway.
Fue tanto el interés que se tomó el novelista por potenciar el acontecimiento que donó los trofeos para los ganadores, con la condición de que quien se impusiera en tres oportunidades, tenía derecho a guardar en sus vitrinas la copa de campeón absoluto.
Escrich reveló a Excelencias que un equipo del antiguo Club Náutico Internacional de La Habana, desaparecido en 1960, obtuvo en tres oportunidades el sitio de honor y, por lo tanto, se hizo acreedor del galardón, pero de tal trofeo se desconoce su paradero, al igual que el conquistado en la versión de 1960 por el presidente Fidel Castro, ocasión en que emuló con Hemingway.
El Comodoro precisa que el famoso novelista, quien plantó residencia en las afueras de la capital cubana, ocupó la vicepresidencia de la IGFA al crearse esta institución en 1939, y dio un espaldarazo especial a la cita habanera con su nombre y su participación.
Los otros torneos de la pesca deportiva en La Habana son el Blue Marlin, el del Peto o Wahoo y el de la Hispanidad, éste último con base en Marina Tarará, todos de igual manera en locaciones ideales para las “capturas” (se utiliza el sistema de tag and release, es decir, capturar, marcar y soltar), porque en las aguas del Golfo, cercanas a Cuba, los peces encuentran un paraíso para vivir y reproducirse.
Otras ofertas Heredera de la condición de puerto seguro que la bahía habanera desempeñó en tiempos de la colonia, la Marina Hemingway se destaca hoy como destino de regatas que se originan en diversos puntos del planeta.
Una que alcanzó relevancia histórica, es la Cádiz (España)-La Habana (Cuba) en 2001, que reunió a 38 embarcaciones de la nación ibérica, objeto de una resonancia sin precedentes, en tanto rememoraba la hazaña realizada por el almirante Cristóbal Colón cuando llegó a tierra americana.
Participantes de la regata Clipper Ventura, con origen en el puerto británico de Southampton, quedaron tan complacidos por los servicios, ofertas y condiciones de la instalación habanera, que han fondeado sus embarcaciones en tres oportunidades: 1998, 2000 y 2002.
Según los directivos del Club Hemingway, para 2005 se prevé de nuevo el arribo de las 12 naves que participan en esa competencia, bajo los auspicios del armador Robin Knox Johnston, el primer navegante que dio la vuelta al mundo en solitario, sin escalas, en 312 jornadas, hazaña que le valió el título de Lord.
Otras regatas del circuito habanero son la Castillo del Morro, que se disputa entre las instalaciones de Marina Hemingway y la legendaria fortaleza situada a la entrada de la bahía, y la Feliz Fin de Año en La Habana.
Nuevos eventos Un proyecto formulado por el Club Transcaribe, de Guadalupe, incluye a toda Cuba como punto de encuentro de regatas y rallies marineros. La propuesta abarca la realización de competencias por todo el Caribe y meta o fin en Cuba.
En la primera versión, acordada para mayo venidero, una carrera de navegantes finalizará en la oriental provincia de Santiago de Cuba y después sus concursantes irán tocando puerto a puerto, marina a marina toda la geografía de la Isla Grande del Caribe durante un mes.
En cualquier caso, estima el Comodoro Díaz Escrich, se trata de concretar los sueños del Club Hemingway, de confraternizar y consolidar a todos los ribereños del mar de las Antillas, el cual si una vez permitió el contacto con el europeo, hoy día ayudará a que nos conozcamos mucho mejor.