Aruba Diminuto paraíso turístico
Playas espectaculares, Fondos marinos únicos, una isla del Caribe con Todo el Placer Incluido
Aruba pudiera recorrerse a pie, casi sin cansancio, en unas pocas jornadas. El mar tranquilo, la arena suave de sus playas y su pequeño tamaño invitan a una caminata. Apenas 30 km de longitud y 8 km de ancho; apenas 193 km2 de superficie.
Sin embargo, este diminuto país, uno de los más pequeños del planeta, es paradójicamente, paraíso grande del turismo, con una singular mezcla de cultura y tradiciones neerlandesa (léase holandesas) y caribeñas.
La ínsula está catalogada como el segundo mejor destino del mundo para la práctica del buceo de naufragios (wreck diving), debido a que cerca de sus costas existe una gran cantidad de barcos y aviones hundidos.
Precisamente, desde submarinos de grandes ventanales puede uno darse el gusto de hacer un viaje turístico inusual: ¿cómo paisajes…? los hermosos fondos marinos arubenses; multicolores arrecifes coralinos de la zona de Aráis; peces tropicales únicos en su hábitat natural y, por si fuera poco, restos de embarcaciones hundidas como el Antilla, uno de los contados cargueros alemanes hundidos en el Caribe durante la Segunda Guerra Mundial.
Al suroeste encontrará diversidad de playas como Manchebo, Eagle, Palm Beach, Malmok Beach, todas ubicadas en una zona de alto nivel turístico; además del famoso Club de Campo Tierra del Sol para los amantes del golf.
Los amplios salones de sus hoteles, hacen de esta isla, un sitio ideal para convenciones y reuniones de negocios. Su gastronomía, con infinidad de restaurantes, ofrecen además de la comida típica o local, una variada selección internacional. Cuenta además con una infinidad de centros comerciales, que no tienen nada que envidiar a los mejores del mundo. Si desea acercarse a la larga y próspera historia arubense puede conocerla mediante sus museos y galerías, en Orenjestad, la capital, silueteada de calles y casas construidas al estilo holandés más refinado. Ejemplo es el Royal Plaza Mall, centro comercial de estilo colonial neerlandés situado frente al malecón capitalino y con fachada de vivos colores.
El oriente de la isla se caracteriza por aguardar diversos puntos de interés, que aun conservan restos de civilización indígena como las Cuevas de Guadirikiri y Fontein, o el pueblo de Savaneta, considerado como el más ancestral de Aruba. De igual interés es Spanish Lagoon, un lugar que recuerda la época de los piratas y las playas de Rodgers Beach y Baby Beach, esta última considerada única de su clase pues permite a los más pequeños disfrutar de arena, sol y mar sin peligro alguno por la escasa profundidad de sus aguas. En Aruba no se asombre por la hospitalidad de su gente y no pierda la oportunidad de tomar un auténtico cóctel caribeño para brindar «Bon Bini a Aruba» en lengua arubense.
Después podrá afirmar alegremente que brindó en el más diminuto paraíso del turismo mundial.