El Salón Internacional del Automóvil de China 2010 es considerada la feria automotriz más importante de Asia. Cerró el pasado 27 de Abril con una exhibición de prototipos entre los que se destaca el Shooting Break Concept de Mercedes-Benz. En algunos medios lo consideran un utilitario con estampa de Coupé. Se pronostica que la firma germana lo presentará como el nuevo CLS para 2011, en versión familiar pero cupé.

La denominación Shooting Break deriva del nombre que se dio a un tipo de carruajes que utilizaban los cazadores ingleses para llevar sus equipos a los puestos de caza. En términos de diseño un Shooting Break se considera un cupé de dos puertas y cuatro plazas al que se le añadía un gran maletero, pero Mercedes evolucionó este concepto y muestra un modelo que pretende acoger a sus ocupantes con la comodidad de un familiar y la deportividad de un cupé. Estamos pues, en presencia de un familiar muy dinámico con un diseño afilado y unas ventanillas sin marco y de pequeñas dimensiones. El frontal tiene un alargado capó y una luneta de amplias dimensiones que unida al techo panorámico y acristalado confiere una gran luminosidad al habitáculo. En la vista lateral, dos nervaduras copan las cuatro puertas, alcanzando los abultados pasos de rueda traseros, que junto a la elevada línea de cintura, cierran un conjunto de marcada personalidad. Los grupos ópticos delanteros y traseros están compuestos por 71 leds y un sistema de iluminación inteligente que incluye las funciones de los faros dinámicos como el Adaptive High Beam Assist. Este dispositivo adapta automáticamente el alcance del haz teniendo en cuenta los otros vehículos que circulan en el mismo sentido o en sentido contrario. Un portón trasero da paso a un maletero recubierto en madera, con listones de aluminio, para facilitar la carga de objetos pesados y varios cajones en los laterales con tapa, destinados para guardar accesorios. En el interior, la madera y el cuero lo envuelven todo. Está tapizado en piel, desde el panel de instrumentos a los asientos, con no menos de tres tipos, entre los que se cuentan napa o alcántara como revestimiento textil, todos ellos con doble ribeteado artesanal. Posee cuatro asientos, idénticos entre si y especialmente ergonómicos, separados por una consola central fabricada en madera y con el nombre de Mercedes incorporado en caligrafía clásica. A la deportividad de este prototipo contribuyen unas llantas de 20 pulgadas de diseño biónico y de 5 radios, montadas con neumáticos 255/30 ZR delante y 285/25 ZR detrás. El motor que anima al Shooting Break es de la nueva generación de bloques en V de la marca alemana. Es un V6 a 60° con inyección directa de gasolina y una cilindrada de 3.5 litros que aporta 306 CV de potencia y 370 Nm de par motor, y garantiza unos consumos y emisiones ajustadísimos gracias a la tecnología BlueEFFICIENCY añadiéndose el conocido sistema de arranque y parada (star-stop).