A veces el tiempo va tan rápido que al comienzo del año uno no sabe en cual está, yo hace unos días tuve serias dudas si este era el 2004….

Ya más centrada y convencida de que estamos en el 2005, he vuelto inevitablemente a hacer mil planes y a viajar con la imaginación, como siempre hacemos todos, ante el prometedor panorama de tener algunas vacaciones por delante, en diferentes momentos de los futuros meses.

Con nuestra revista nos gusta pensar que ayudamos a soñar, que contribuimos a poder alentar las ilusiones de recorrer el mundo según disfrutamos del tacto del papel entre nuestros dedos. Queremos creer que cada foto o reportaje es el inicio de un camino que puede culminar en llegar a ese destino, experimentando en propia piel lo que las líneas cuentan.

Pase lo que pase en paraísos que ahora deben recuperarse, con el dolor de ver lo que sucede en nuestro mundo no siempre tan bello, porqué no nos ponemos como asignatura para cada momento del resto de nuestra vida, disfrutar, cuidando lo que nos rodea, queriendo un poco más a todos nuestros semejantes y pensar que a veces los viajes más apasionantes pueden estar mirando por los ojos de otro a quien probablemente tengamos al lado. No tenga miedo de lo desconocido, descúbralo.

Consuelo Elipe