No en vano, tras esta metamorfosis el RS luce una fisonomía más pujante y moderna, con las entradas de aire frontales, el alerón trasero de mayores dimensiones y el logotipo RS presente en la parrilla y el portón del maletero. Para más novedad, este vehículo llevará de serie faros de Xenón con iluminación adaptativa, focos antiniebla con función de alumbrado lateral y luces LED diurnas (dos filas ubicadas en los extremos del parachoques); además del control de estabilidad ESP y de tracción TCS, seis airbags y llantas de aleación de 18 pulgadas , montadas en neumáticos Continental Sport Contact de medidas 225/40. En cuanto a la motorización, este modelo mantiene el bloque bencinero TSI de 2.0 litros presente en su predecesor, aun cuando es notable la reducción de su consumo en hasta 0,3 l, debido en parte a la optimización del chasis, que adelgaza 10 kilos y decrece 12.7 cm , con una nueva suspensión. Como alternativa en gasóleo, monta el potente 2.0 TDI de inyección directa por conducto común que ostentan otros modelos del Grupo Volkswagen como el SEAT León o el Audi A3. Ambas mecánicas irán acopladas a un cambio manual de seis velocidades o uno automático «DSG» también de seis relaciones. Así que solo resta ver cómo le va a esta berlina frente a rivales como el Peugeot 407, el Renault Laguna, el Audi A4, el Honda Accord, el BMW Serie 3, el Lexus IS o el Mercedes-Benz Clase C. No se lo pierda.