No en vano, este sedán llega con argumentos más que convincentes para erigirse en una excelente propuesta como automóvil familiar, compartiendo la misma plataforma que el VW Jetta y el Audi A4, aunque se desmarca de estos por el carácter propio de sus rasgos estéticos, con líneas bien marcadas, faros alargados y un maletero que abre estilo hatchback al mover el medallón junto a la cajuela, lo que le otorga un acceso sin parangón al portaequipaje, ya de por sí bastante amplio.

Por demás, el SEAT Toledo crece respecto a su antecesor hasta rozar los cuatro metros y medio de largo, con un              habitáculo más espacioso gracias a sus 2.6 m entre ejes, lo que permite que cinco adultos puedan viajar cómodamente, para plantar cara a competidores exigentes como el Peugeot 301 y el Skoda Rapid.

Disponible inicialmente en dos acabados (Reference y Style) porta de serie elementos como los retrovisores de ajuste eléctrico, el volante multifunción, radio-CD, aire acondicionado, ordenador de a bordo, seis airbags (laterales y de cortina), ESP, ABS y ESC. A lo que el Style añade, además, llantas de aleación de 16 pulgadas, faros antiniebla con función cornering, climatizador y elevalunas eléctricos traseros, entre otros.

Mientras, en el apartado mecánico presenta cuatro modernos motores de gasolina TSI y dos diesel TDI, con un rango de potencias que va desde los 75 caballos del pequeño 1.2 TSI hasta los 122 CV. Evidentemente no es un auto deportivo, pero las suspensiones hacen su trabajo sin rechistar.

Así que, con un precio interesante (desde los 13 990 hasta los 19 400 euros y su gran funcionalidad, el Toledo 2013 busca  batir al fin el millón de unidades vendidas en todo el mundo desde que en 1991 salió a la luz su versión original.