Como todos conocemos, las llaves actuales cumplen las funciones principales de cierre y apertura del vehículo, que puede funcionar mediante telemando, así como en algunos casos la apertura y cierre de las ventanillas y techo corredizo. La otra función principal es el bloqueo electrónico de arranque, es decir impedir el arranque del vehículo si no hay un reconocimiento de la llave original. A estas funciones puede  añadirse la apertura a distancia del maletero o también la opción de arranque de una calefacción en el vehículo antes de abordarlo, lo cual resulta muy útil en países fríos. En otros casos se incorporan las memorias de las posiciones de los asientos y del volante, para que estos se ajusten automáticamente antes de acceder al vehículo.  

Ya desde el año 2012 la compañía alemana BMW incorporaba una llave que era capaz, además, de registrar las averías acumuladas en el vehículo. Al conectarla a un lector de llaves, se envía la información a un servidor y es posible conocer el mantenimiento que se le debe dar al vehículo, así como algunas de las averías principales. Puede aparecer un color amarillo que indica que las revisiones están cercanas o rojo que debe hacerse inmediatamente. 

Ahora  Mercedes-Benz se ha sumado a esta estrategia introduciendo una llave en sus nuevos modelos que realiza una función similar. Esto forma parte de un lanzamiento de la conocida marca teutona para asegurar un mejor servicio a sus clientes. El sistema dispone de una estación de llave o Xentry Key Station (XKS), que estará disponible en todos sus concesionarios y a través de la cual se realizará “una lectura de la llave” y la transferencia de sus correspondientes códigos a una plataforma automática (llamada Xentry Portal) con la que trabajan los recepcionistas (Asesores de Postventa de Mercedes-Benz). Con esta información es posible disponer de un test breve y rápido (Quit Test) del vehículo sin conectar ningún equipo de diagnóstico y definir, más rápido, los servicios de mantenimiento u otros trabajos que resulten necesarios. 

La instalación de estas Key Station es realmente sencilla y se conectan por puerto USB al ordenador con el que se comunican. Poseen dos LED: uno de estado (superior) y otro de comunicación (inferior). El LED de estado puede estar en amarillo cuando el XKS está conectado y en verde cuando está listo para la operación. Si hay error en la memoria de datos, entonces indica rojo intermitente. Cuando la lectura de la llave ha sido satisfactoria este LED indica con color azul.

El LED de comunicación, por su parte,  indica con azul intermitente que la llave se está “leyendo” y se están extrayendo sus códigos. Se mantiene encendido en azul una vez que concluyó la lectura de los datos. Si existe error en la lectura de los datos este LED pasa a color rojo. Los datos quedarán almacenados en el XKS hasta tanto se inserte una nueva llave o se desconecte el equipo.

Hay que cuidar de posibles interferencias electromagnéticas durante el proceso de lectura de las llaves.

Este procedimiento ya se viene empleando con éxito en varios países de Europa y Asia, y está prevista su extensión a Latinoamérica durante este año y el próximo.