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Y para ello la tercera generación del buque insignia de la marca checa luce de entrada un nuevo lenguaje de diseño que deriva del concept Skoda Vision C, de manera que si bien la soberbia berlina crece —su distancia entre ejes se ha incrementado en 80 mm—, sus formas son ahora más gráciles y actuales que nunca.

De hecho, el interior del Superb 2015 se ha modernizado por completo para brindar un entorno a tono con su fisonomía innovadora y elegante, con tres niveles de equipamiento (Active, Ambition y Style), además de una variante Laurin & Klement, en los que destaca un verdadero arsenal de soluciones Simply Clever.  De tal modo que freno de estacionamiento eléctrico, Park Assist, conectividad USB y aux-in, MirrorLink con acceso a Apple CarPlay o Android Auto, son algunas de las aplicaciones que hallaremos, incluso en sus versiones más básicas.

Aunque las bondades del flamante modelo no se acaban ahí, toda vez que el Superb 2015 se estrena con un amplio abanico de opciones mecánicas: seis motores en gasolina y seis en gasóleo, que cuentan con Start/Stop de serie y cumplen con la normativa Euro6. Para pulir la eficiencia hasta ese punto, cabe señalar que esta nueva generación ha logrado adelgazar hasta 75 kg con una depurada aerodinámica, a la vez que añade la tecnología Active Cylinder Technology, capaz de desactivar la alimentación de los cilindros 2 y 3 cuando no es necesaria.

En tanto, Skoda también ha puesto gran esmero en el apartado de  seguridad, instalando sistemas avanzados como el control de crucero adaptativo, los asistentes de atascos y cambio involuntario de carril, el detector de ángulo muerto y el reconocimiento de señales, entre otros. Argumentos de sobra válidos para erigirse en una alternativa real a las berlinas Premium.