Si tras su paso por Margarita al viajero se le pregunta cuál es la huella más impactante de sus bellezas naturales, evocará el goce estético ante el tinte soleado de sus incomparables atardeceres. Aquel que es amante de las emociones fuertes elogiará con entusiasmo sus inmejorables condiciones que facilitan las recreaciones y deportes acuáticos, subacuáticos y aéreos. En Margarita no abundan sólo las playas, sino las marcas de tradiciones y riquezas culturales. Históricamente ha contado con un caudal de poetas, literatos, artistas plásticos, orfebres y artesanos que la prestigian nacionalmente y más allá del ámbito caribeño. Junto a las ricas construcciones y fortines, costumbres religiosas, artesanía y otras manifestaciones culturales, figura la hospitalidad del pueblo margariteño, al cual le encanta que el visitante venga a compartir todo lo bello que la isla ofrece. Margarita es, pues, un pequeño universo para descubrir que se abre a los sentidos del recién llegado. El salitre imprime un olor peculiar al aire puro y descontaminado de la ínsula. Como la economía local se nutre también, y en segundo orden tras el turismo, de la explotación de la pesca, su gastronomía se especializa en pescados y mariscos acompañados de los típicos tostones (plátanos verdes aplastados fritos) y arepitas que complacen al más exigente gourmet. Otro olor típico que identifica a la isla antillana-caribeña es el del orégano, que aquí se convierte en suerte de souvenir, pues lo expenden en pequeñas cestas de fibra vegetal que lo llevan dentro, envuelto en anudadas servilletas multicolores. Ya de retorno a casa, el viajero conservará con nostalgia las aromáticas hojas de orégano Matasiete (nombre vinculado con la historia local), que junto con otras obras artesanales margariteñas darán fe de su paso por esta ínsula venezolana privilegiada por la naturaleza. La ínsula, miniatura de la geografía (67 km de este a oeste y apenas 23 km de norte a sur) dispone de 168.000 metros de costa con las más bellas y variadas playas, para gustos tan diferentes como los de aquellos que prefieren aguas mansas y los que aceptan el reto de embravecidas olas y enigmáticas corrientes marinas. Cristóbal Colón pisó su suelo en 1498, en un lugar denominado por los indios guaiqueries Paraguachoa (abundancia de peces) y debe su nombre al deseo de rendir homenaje a Margarita de Austria, esposa del Infante Don Juan, hijo de los Reyes Católicos. Con una población exclusivamente urbana, cuenta con dos ciudades principales: La Asunción, su capital y Porlamar. En realidad Margarita es resultado de la unión de dos islas vinculadas por el istmo de La Restinga. En cuanto a las formas de relieve presenta algunas formaciones elevadas y algunas costeras. A ambos extremos de la isla se destacan dos macizos montañosos unidos por un cordón litoral que encierra la laguna nombrada igual que el mencionado istmo. La influencia del mar y la acción de los vientos alisios que contribuyen a refrescar el ambiente en algunas áreas no permiten que las temperaturas sean rigurosas. La distribución estacional y espacial de las lluvias comprende un periodo muy breve, pues la estación lluviosa se extiende únicamente durante los meses de diciembre y enero. Por su formación insular marítima Nueva Esparta se ubica totalmente dentro de la hoya de la vertiente del Mar Caribe. Dadas las condiciones de aridez predominantes y la poca extensión del territorio, el sistema hidrográfico es muy reducido. Cursos de agua no permanentes son los ríos San Juan y el Valle. Nueva Esparta es uno de los estados con mayor desarrollo de la industria del ocio en Venezuela. La ciudad de Porlamar, con una estructura urbana de fuertes contrastes, sobresale por sus múltiples ofertas de productos de todo el mundo facilitados por su condición de Puerto Libre, más los casinos y casas de juego, últimamente legalizados, aunque limitados a los hoteles de cinco estrellas. Principales Playas Margarita reserva al visitante innumerables playas para los más diversos gustos: desde oceánicas hasta pacíficas, de aguas templadas o frías, concurridas como El Agua o solitaria e íntima como

Macanao. En la Costa Norte se encuentran: Juangriego, La Galera, Caribe, Puerto Cruz, Puerto Viejo y Manzanillo. Sitio próspero y moderno en sus construcciones y repleto de historia, Juangriego está a 24 kilómetros de Porlamar. La Galera se halla en la bahía de Juangriego. De aguas calmadas, tiene una longitud de 1.200 metros y una temperatura del agua de 23 grados C, mientras Playa Caribe, ubicada más al noreste de La Galera, presenta características que la hacen adecuada para los amantes de la tranquilidad. En uno de sus extremos tiene unas grutas solitarias y sus aguas son oceánicas. Longitud 1.050 metros y temperatura del mar 23 grados C. La bahía de Puerto Cruz brinda la más ancha, blanca y fresca playa de toda la ínsula. Sus aguas son oceánicas. Longitud mil metros, temperatura del agua 23 grados C. A su lado se sitúa Puerto Viejo, cuyo oleaje es más sosegado, por lo cual brinda seguridad para los niños y nadadores inexpertos. Longitud 700 metros, temperatura del agua 23 grados C. Manzanillo constituye una pintoresca bahía rodeada de montañas en el extremo noreste de la isla. Su paisaje cobra colorido con las embarcaciones de los pescadores. Longitud 600 metros, temperatura del agua 23 grados C. En la Costa Este figuran: El Agua, Parguito, El Tirano, El Cardón y Guacuco. La playa más frecuentada y de mayor desarrollo turístico de Margarita es El Agua. De oleaje vigoroso, posee aguas claras. Los fines de semana se celebran en ella actividades de diverso tipo, como conciertos, concursos de tangas y otras. Longitud cuatro mil metros, temperatura del agua 24 grados C. Debajo de El Agua se localiza Parguito, que por su corriente y fuerte oleaje se le considera idónea para practicar surfing. Longitud 900 metros, temperatura del agua 22 grados C. La playa El Tirano, llamada así por haber desembarcado allí Lope de Aguirre, el conquistador español, contrasta con las otras de la isla por sus aguas siempre turbulentas. Sus célebres atardeceres son siempre impresionantes. El balneario Punta Cardón, a 10 kilómetros de la capital margariteña, resulta muy visitado por los turistas. A seis kilómetros de La Asunción figura Guacuco, un sitio muy popular entre los margariteños. En sus alrededores se construyen varias instalaciones de desarrollo turístico. Longitud dos mil metros, temperatura del agua 22 grados C. En la Costa Sur se hallan: Pampatar, Concorde, La Caracola, Bella Vista y El Yaque. Localizada en una hermosa bahía, Pampatar da su nombre a un importante puerto de pescadores. En sus tranquilas aguas se practican deportes acuáticos. Longitud 1.500 metros, temperatura del agua 25 grados C. Junto a la marina Concorde se encuentra la playa homónima, la cual se considera excelente para los deportes náuticos. Longitud 380 metros, temperatura del agua 26 grados C. La gente joven, sin embargo, prefiere disfrutar, divertirse y encontrar nuevos amigos en La Caracola, que está de moda. Longitud dos mil 200 metros, temperatura 24 grados C. Bella Vista es la playa de la ciudad de Porlamar. Posee una longitud de mil metros y una temperatura de 27 grados C. Las aguas pacíficas y tibias, además de poco profundas de El Yaque la hacen propia para los infantes. Allí se practica windsurf. Está ubicada detrás del aeropuerto. Longitud dos mil metros, temperatura del agua 29 grados C. En la península de Macanao (oeste) aparecen: La Restinga, Punta Arenas, La Pared y El Tunal. La Restinga constituye la porción de arena que une la isla de Margarita con la península de Macanao. Se llega a ella a bordo de embarcaciones luego de hacer un paseo entre canales bordeados de manglares. Tiene 10 kilómetros de playa y arena. Temperatura 26 grados C. Punta Arenas posee arena fina y se halla en la porción más occidental de la ínsula, junto al poblado de pescadores de igual nombre. En el lugar el visitante se deleita con el pescado fresco y tiene la opción de algunos deportes acuáticos. Longitud 1.500 metros, temperatura del agua 26 grados C. A unos 60 kilómetros de Porlamar y exhibiendo una extraordinaria belleza con sus aguas oceánicas de gran tranquilidad, está La Pared. Es conocida por sus espléndidas caídas de sol que se observan desde un mirador sobre toda la playa. Longitud 1.500 metros, temperatura del agua 26 grados C. De una extraordinaria belleza y también aguas oceánicas, El Tunal está ubicada junto a un pequeño pueblo de pescadores. Dista unos cuatro kilómetros de La Pared. Longitud dos 1.400 metros, temperatura del agua 26 grados C.

Atracciones turísticas Margarita tiene diversos lugares para interesantes excursiones entre las que sobresalen las visitas a edificaciones religiosas y lugares históricos como monumentos y fortines. Las fortificaciones levantadas para la defensa contra los ataques piratas denotan la importancia de la isla durante el periodo colonial. En el Fortín de Santiago de La Caranta se recuerdan las batallas libradas en esta construcción de 1595, destruida por piratas holandeses en 1626. Desde ese lugar se tiene un magnífico panorama de toda la bahía de Pampatar. En el transcurso de la época colonial, los españoles levantaron fuertes y castillos para proteger los puertos contra los piratas. Así, el Castillo de San Carlos en Pampatar, vigila la bahía de igual nombre. Su construcción empezó en 1622 y se terminó unos 20 años después. Un lugar de significado especial en la historia local es el Castillo de Santa Rosa, en La Asunción, edificado en 1680 y en el cual estuvo presa Luisa Cáceres de Arismendi, heroína de la independencia. Esta construcción ofrece una espléndida vista sobre la capital y el valle de Santa Lucía. Para disfrutar el atardecer del Caribe, los margariteños invitan al Fuerte de La Galera, desde donde se dominan las bahías de Juangriego y La Galera. En la población de Santa Ana del Norte, un sitio intermedio entre La Asunción y Juangriego, está el Fortín España. El recorrido se completa visitando la Columna de Matasiete, en el cerro de igual nombre, monumento erigido en honor a un grupo de esforzados patriotas. En cuanto a los lugares de valor religioso aparece en primer término la Basílica de Nuestra Señora de El Valle, donde se halla la Virgen patrona del oriente venezolano. Un recorrido por las bellas construcciones que datan del siglo XVII, comprende la Catedral de Nuestra Señora de La Asunción, edificada en 1617, donde se venera a la Virgen de La Asunción, representada en una talla del siglo XVII. Después viene la Iglesia del Cristo del Buen Viaje, patrono de Pompatar, que debe su nombre a la imagen del Milagroso de los pescadores, cuya historia se remonta a 1748. El viajero puede también trasladarse hacia la Iglesia de Santa Ana del Norte, la cual conserva imágenes religiosas del período colonial, y posteriormente a la Iglesia de Juangriego, cuyo culto está consagrado a San Juan Evangelista.

Museos El Museo Francisco Narváez, en Porlamar, muestra en su exposición permanente obras del laureado escultor margariteño, así como de artistas de la isla y del Oriente de Venezuela y en La Asunción el Museo Nueva Cádiz expone piezas de la época colonial. Una parada en la vía que va de Juangriego al aeropuerto permite visitar el Museo Tacuantar, consistente en pequeñas casas de construcción muy rústica, que guardan en su interior artesanías procedentes de todas partes de Venezuela. Muchos turistas de otros continentes aquilatan conocer el Museo Marino de Boca de Río, ubicado en Macanao. En su entrada exhibe un esqueleto de una ballena sardinera, de 14,6 metros de longitud. Alberga numerosas especies marinas, utensilios de pesca y maquetas de embarcaciones, entre otras atracciones del mar. Desde Margarita parten tours a Coche y Cubagua, dos núcleos rocosos cubiertos de sedimentos marinos, que alternan en forma de terrazas de hasta 50 metros de altitud con algunos acantilados. La isla de Coche está localizada a poco más de una hora de navegación y dispone de una playa en forma de herradura, de aguas muy tranquilas, arenas de un blanco resplandeciente y una gran paz. En la isla de Cubagua se pueden visitar las ruinas de Nueva Cádiz, primera ciudad fundada en Venezuela y primera de Suramérica destruida por un maremoto. Además de disfrutar de su playa, cuyo paisaje y colorido ha motivado el pincel de muchos artistas, el excursionista puede practicar snorkel en un ferry hundido a poca profundidad.

Gastronomía Para gustos y bolsillos, Margarita brinda un sinnúmero de bar-restaurantes de calidad y cocinas que van desde la margariteña, hasta la asiática, la europea y la norteamericana, pasando por la mexicana y la peruana. El restaurante Bahía, que tiene fama por sus langostas y ofrece también una variada carta de platos internacionales, cuenta con una privilegiada vista panorámica hacia la playa Bella Vista. Los que gustan de la cocina francesa pueden frecuentar a Cocody y Le Chateaubriand, en tanto los amantes del inigualable chile como ingrediente característico de los apetitosos platillos mexicanos, un regalo al paladar, tienen a su disposición El Patio del Mosquito Coast y El Jalapeño. Pero para saborear los frescos productos del mar existe un establecimiento singular: Nikkei, donde dominan como pocos los secretos de cocinar mariscos. Conocido como “Un rincón de Francia en el Caribe”, Cocody tiene reservada para sus clientes una romántica terraza. Presenta una variada carta y recomienda no tener prisa pues se toman un tiempo en la preparación de sus platos, para la espera se ofrecen excelentes tragos y pasapalos, nombre que dan los venezolanos al saladito. Le Chateaubriand, cuya oferta incluye además excelente comida internacional, se distingue por un agradable ambiente proporcionado por candelabros y música en vivo. Está localizado en las instalaciones del hotel Margarita Hilton. El primer restaurante de comida mexicana en esta isla antillana, El Patio del Mosquito Coast, se encuentra en una terraza con una magnífica vista a la bahía de Guaraguao. Para el disfrute de los bailadores y fanáticos de la música caribeña ofrece las muy concurridas noches de rumba, una de las atracciones de la movida y alegre vida nocturna isleña. En El Jalapeño pueden degustarse los más deliciosos antojitos mejicanos: tacos, supermachos y tostadas, en un agradable ambiente al aire libre. La peruana y japonesa, dos nacionalidades altamente conocedoras de los secretos de la preparación de platos con productos del mar, se unen en el restaurante Nikkei. Los chefs cocinan de forma espectacular delante de los clientes. Tienen especialidad en langosta, langostino y mariscos. Ya Margarita, como las grandes ciudades, posee su primer Cyber Café. En el lugar se reúnen turistas y locales a navegar y enviar o recibir sus correos electrónicos vía Internet. Sirven deliciosos sandwiches, cafés, ensaladas y tienen una barra de licores. Por último, en Cheers, renombrada casa de comidas, está la barra más concurrida de esta isla del Caribe venezolano. Deportes aéreos y otras distracciones El bungee, una excitante diversión para los partidarios de las emociones fuertes, consiste en lanzarse desde una gran altura en dirección a la arena, pero con la seguridad de que el arnés en el tobillo detendrá al practicante a tiempo y lo hará rebotar varias veces en el aire. El bungee está en playa El Agua y funciona durante las temporadas altas. Los ícaros despegan del cerro El Copey a 755 metros. Las condiciones de vuelo son magníficas debido a los vientos de ladera y se pueden lograr alturas de hasta 600 metros sobre el punto de despegue, con un tiempo de vuelo promedio entre 45 minutos y dos horas. En playa El Agua los paracaidistas saltan desde los ultralivianos, por lo general desde una altura de 1.500 metros. Las prácticas, limitadas sólo a verdaderos profesionales, se llevan a cabo durante los fines de semana. Parasailing: El parasail es un paracaídas sujeto por una lancha que pasea al vacacionista a lo largo de la playa La Caracola. El que lo practica va flotando en el aire disfrutando de la brisa, el sol y el formidable panorama. El vuelo en ultralivianos se reserva como una de las actividades más excitantes para efectuar durante la visita a la isla de Margarita. Estos pequeños aviones constituyen una gran atracción pues permiten obtener los más hermosos cuadros aéreos para fotografías. Buceo y otros deportes acuáticos Buceo.- En la isla existen muchos lugares ideales para practicar snorkeling, pues hay sitios con abundancia en vida marina típica del arrecife, peces ornamentales, moluscos, esponjas, caracoles y otras especies. En Los Frailes, unos islotes localizados al noreste de Margarita, se cuenta con adecuados sitios para el snorkeling, como una piscina natural o hacer buceo en corrientes. Otra atracción para actividades subacuáticas lo constituye El Farallón, formación rocosa situada en la bahía de Pampatar, con profundidad máxima de 15 metros y temperatura promedio de 25 grados C. Adicionalmente se organizan excursiones a las vecinas islas de La Blanquilla, Los Hermanos y Los Testigos, donde la fauna es exuberante y las condiciones del agua excelentes. Las playas que mejores condiciones brindan para jetski son: Punta Arenas, La Galera, Concorde y Pampatar, donde regularmente se organizan competencias locales e internacionales. Un lugar adecuado para el surfing, Playa Parguito, tiene una forma elíptica y está situada al sur de playa El Agua. Debido al arrecife rocoso que penetra en el mar con un ángulo preciso, la corriente forma un fuerte oleaje. Allí se reúnen los amantes de este deporte y a menudo hay competencias a nivel nacional e internacional. La Playa El Yaque, localizada detrás del aeropuerto internacional Santiago Marino, es reconocida como uno de los siete mejores sitios del mundo para la práctica de surfing por la velocidad, constancia y dirección del viento. En El Yaque se puede navegar diariamente con una temperatura en el aire de 29 grados C y el viento sopla todo el año a unos 25 nudos.