- Puerto Rico al 38 Festival del Caribe
Las islas de Cuba y Puerto Rico tienen mucho en común. A ambas las bañan las aguas del mar Caribe, y su gente baila salsa, reguetón… Sus pueblos son antillanos, mestizos y criollos de sangre africana, española e indígena. Son, como dijera la poetisa, de un pájaro las dos alas. Transcurridos casi treinta años, Puerto Rico vuelve a ser país invitado de honor al Festival del Caribe, que se celebrará del tres al nueve de julio en Santiago de Cuba. La también conocida como Fiesta del Fuego es convocada por el Ministerio de Cultura de Cuba, la Dirección Provincial de Cultura y la Casa del Caribe.
Las riquezas culturales de Puerto Rico la acreditan como una de las naciones que puede mostrar y aportar una espiritualidad de mucho valor al proceso de enriquecimiento de la identidad caribeña y al ideal de integración de nuestros pueblos. Diversas manifestaciones y elementos conforman la cultura popular de este país, que sirve como vehículo de transmisión y conservación del patrimonio cultural.
Hasta la fecha han confirmado su participación alrededor de seiscientos artistas de veintiséis países. Las delegaciones más numerosas serán Estados Unidos, Argentina, Venezuela, México y Puerto Rico, este último con más de ciento cincuenta participantes, entre los que asistirá el grupo de bomba y plena Majestad Negra, además de Andy Montañez, Tony Mapeyé y las agrupaciones boricuas Patria y Cultura, Plena Combativa, Bombazo Dance Co., Taller Tambuyé y Las Atípicas.
Además, se realizarán diecinueve exposiciones, una dedicada a Eduardo Roca (Choco), Premio Nacional de Artes Plásticas 2017. Se trata de una gigantografía de una obra de Roberto Chile que será emplazada en el barrio santiaguero del Nuevo Vista Alegre. Como es habitual se realizará el coloquio El Caribe que nos une y el Taller Internacional de Religiones Populares en el Caribe. Para este último, el tema central será «Religiones populares locales, globalización y diversidad».
La fortaleza de la nación puertorriqueña no le permite amilanarse, ni siquiera ante desastres naturales como el huracán María. Que lo escuchen hasta los ancestros: Puerto Rico viene a la Fiesta del Fuego. ¡Puerto Rico se levanta!