Enero es un mes en el que el verano y las vacaciones escolares se celebran en los países de América del Sur, pero para el Colectivo de Escritura Migrante fue una época de mostrar obras artísticas y conocer diferentes poéticas, afirmando la literatura en diálogo con otras artes. Un momento para tejer relaciones entre migrantes, nómadas, seminómadas y personas que siempre están en movimiento y no sienten que pertenecen a ningún punto geográfico específico del planeta. Días para abrazarse, mirarse a los ojos, compartir culturas y conocimientos siempre con cariño.

El Tercer Encuentro Internacional de Escrituras Migrantes se celebró en Santiago e Isla Negra, en Chile, del 16 al 19 de enero, de forma autónoma por un colectivo de escritores de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, México y Uruguay. El objetivo general de la 

reunión es intercambiar y debatir sobre propuestas artísticas, conocimiento cultural y la poética de escritores intermedios que viven o transitan por diferentes países. Propone una producción poética itinerante que instiga la producción de estos escritores y artistas, así como el intercambio cultural, con talleres y presentaciones artísticas siempre abiertos al público con el tema de la poética transcultural.

El tema de la migración es muy relevante hoy. Según la información publicada en un informe de la ONU de 2019, hay 272 millones de migrantes en todo el mundo. En América Latina habitan gran parte de quienes abandonan sus países hacia América del Norte y Europa. Este flujo ha crecido en los últimos años y, aunque Venezuela es uno de los países que más ha aumentado la cantidad de personas que migran, México todavía ocupa el primer lugar en la cantidad de personas que abandonan sus tierras: en total hay doce millones de mexicanos viviendo fuera del país. ¿Y qué hacer en esta situación: construir muros o romper barreras, incluida la del lenguaje a través del arte? Este es uno de los objetivos del Colectivo de Escritura Migrante, que celebra reuniones anuales, siempre de forma itinerante, en diferentes países.

El primer encuentro se realizó en Montevideo en 2017 y el segundo en noviembre de 2018 en Brasil, en las ciudades de Belo Horizonte, Itabira, Moeda y los distritos de Ravena e Ipoema. Siempre se busca una expansión de la participación, incluidos los participantes de Venezuela y Perú que aún no han asistido, pero están buscando esta integración. Después de todo, la migración es un tema recurrente en varios países de América Latina.

El tercero tendría lugar en noviembre de 2019, pero desde octubre las protestas salieron a las calles y la represión fue muy fuerte. Es un período de agitación social como nunca antes en la historia chilena y no teníamos las condiciones de seguridad y viabilidad, por lo que lo pospusimos por dos meses. Actuar en enero fue muy bueno y logramos asociarnos con museos, librerías y centros culturales de referencia. También fue posible seguir este momento histórico y cultural, en el que los muros de las ciudades de Santiago se convirtieron en verdaderos libros con escritos de orden, poesía, instalaciones de arte urbano y las calles con diversas presentaciones artísticas.

Realizamos actividades culturales en diferentes espacios culturales: Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, Museo de Educación Gabriela Mistral, Librería Proyección, Centro Cultural Barracón, Galería Gran Refugio y Teatro Crea Rock. Participé representando a Brasil con performance, música, poesía y coordinando la producción. En la presentación que hice con Duo Sussurros, formado por él y Élcio Lucas, realizaron una actuación muy interactiva. Al final, toda la audiencia se levantó de sus sillas para una especie de catarsis, cantando, bailando y viviendo la poesía sonora con nosotros. A lo largo de la reunión se agregaron presentaciones culturales con los siguientes escritores trabajando la escritura en diferentes lenguajes artísticos: Amapola Araya Rojas (Chile), Ana Straus (Uruguay), Aldo Biglia (Chile), Antu Liwen (mapuche, Chile), Brenda Mar (ques) Pena (Brasil), Camila Albertazzo (Chile), Carlos Soto-Román (Chile), Chary Gumeta (México), Cláudia Vaca Flores (Bolivia), Coke Araya (Chile), Daniel Fernández (Uruguay), Elcio Lucas (Brasil), Eli Rodríguez (Uruguay), Erika Andrea Currea Toro (Colombia, in memoriam), Giuseppe Camelia Intelisano (Italia / Argentina), Gladys Bravo Contreras (Chile), Janina Camacho (Bolivia), Josefa Flores Araya (Chile), Jeison Oviedo Mercado (Colombia), Jéssica Muñoz (Chile), Marcia Rivera (Chile), Leo Lobos (Chile), Liliana Peña (Chile), René Silva Catalán (Chile), Rodrigo Leiva (Chile), Osmany Sabalza (Colombia), Patricio Madiñá (Chile), Silvia Rojas (Bolivia), Tchello d’Barros (Brasil) e Iván Vergudo con el proyecto Uará (Chile / Bolivia).

Durante la reunión, el nuevo destino ya estaba decidido. El Cuarto Encuentro Internacional de Escrituras Migrantes se realizará a finales de este año en Colombia, y estará abierto para el registro y la recepción de propuestas a partir de marzo en el sitio web imersaolatina.com.