Excellences Magazines Web Site
Panamá. "BOQUETE" El Reino de las flores.

Chiriquí es la provincia que alberga este maravilloso lugar, donde por la altura de su ubicación no deja sentirse la característica temperatura tórrida del istmo panameño Se encuentra a 1 000 pies sobre el nivel del mar, entre verdes paisajes, fincas cafetaleras, naranjales, vastos campos de fresas y muchas, muchas flores. Su población, de unos 20 000 habitantes, comparte el diario vivir con turistas de diferentes países como Estados Unidos, Suiza, Yugoslavia, Suecia y Alemania, que llegan hasta aquí atraídos por la promesa de un viaje a un sitio único e irrepetible. El pequeño valle rodeado por hermosas montañas y recorrido por un río de aguas cristalinas, goza del privilegio de un clima casi perfecto y, debido a ello, se ha ganado el apodo del valle de la «eterna primavera».

Viajeros expertos lo consideran uno de los más bellos destinos turísticos del país y a ese reconocimiento bien justificado ha contribuido, sin dudas, un evento singular conocido como la Feria de las Flores y del Café, especie de festival muy tradicional al que concurren floricultores y cosecheros del grano de la región y de otras partes del país, para dar vida a una de las tradiciones más atractivas de Panamá. La feria nació en 1950, cuando un grupo de personas promovió y concretó la idea para que el distrito de Boquete tuviera una proyección más allá de sus propias fronteras. En sus inicios se quería divulgar la producción del excelente café que allí se cosecha y los hermosos jardines que, con gran facilidad florecen y adornan todo el entorno; pero ha terminado por hacerse regular esta hermosa fiesta, de la que ya se han celebrado más de 30 ediciones, y que es capaz de atraer cada vez a más y más personas, hasta más de 120 mil en apenas 10 días de duración.

Múltiples atracciones naturales, excelente clima, gente hospitalaria, ambiente apacible y confortables instalaciones, han hecho de Boquete uno de los mejores lugares de retiro a nivel mundial

Esto ocurre normalmente en enero. Sencillos, desconocidos, y grandes floricultores concurren, con sus variedades y arreglos, muestras y novedades; y también artesanos, creadores, cafetaleros y hombres y mujeres dedicados a sacarle a la tierra, esas maravillas. Así puede afirmarse que a aquella iniciativa debe Boquete hoy su profusa presencia como destino turístico en los folletos y materiales promocionales que se producen sobre Panamá; y el café de la región, su fama. Por demás, la pintoresca ciudad se ha convertido en centro de importantes flujos turísticos, por los múltiples atractivos de interés natural en sus alrededores inmediatos, lo excepcional del clima, la hospitalidad de su gente, la tranquilidad y las infraestructuras disponibles. Tantos son los valores en este sentido, que durante los últimos años Boquete ha sido ubicado entre los mejores lugares de retiro a nivel mundial, atrayendo a cientos de forasteros que deciden hacerse allí de un espacio para pasar largas temporadas. Como productor de café, también es relevante Boquete en todo el contexto panameño y aún centroamericano, pues este es el lugar donde se produce el mejor grano de todo el país; y están radicadas sus marcas más reconocidas: Café Ruiz y Café Sittón. En sus empinadas montañas habita el grupo indígena denominado Gnobe Buglé, más conocido como guaymíe, fuerza de trabajo esencial en las plantaciones cafetaleras y grandes artesanos famosos por sus coloridas, bonitas y vistosas artesanías de chaquiras, los trabajos de cestería, las típicas chácaras y los Nahuas, un tipo de vestido característico entre las mujeres de la etnia. Así es Boquete, ese paraje especial de Panamá que desde hace tiempo también se conoce como «el reino de las flores»

Para viajar a Boquete lo más recomendable es ir en avión, un viaje que demora sólo 50 minutos, partiendo de Ciudad de Panamá

Raisa A. Zayas Pérez